La vitamina D, juega un papel esencial en nuestra vida, no sólo para el metabolismo óseo, sino también en muchas funciones fisiológicas. Su importancia clínica ha trascendido el ámbito de las enfermedades óseas, abarcando sistemas inmunológico, cardiovascular, endocrino y neuromuscular, entre otros.
La mejor manera para tener niveles de Vitamina D sanos y óptimos es la exposición diaria al sol, así como también ver amanecer y atardecer, sin embargo, hay situaciones en donde la exposición al sol no es posible, por lo que la suplementación con Vitamina D podría ser recomendada.
En un nuevo estudio han analizado que las mujeres que tomaron suplementos diarios de vitamina D durante el embarazo tuvieron hijos con huesos más fuertes, y los beneficios perduraron hasta la mitad de la niñez.
Rebecca Moon, investigadora del estudio y profesora clínica de salud infantil en la Universidad de Southampton en Inglaterra, dijo en un comunicado de prensa: “Esta intervención temprana representa una importante estrategia de salud pública”. En Estados Unidos, las pruebas de detección de vitamina D no forman parte de los exámenes universales y las vitaminas prenatales no aportan suficiente vitamina D a muchas mujeres.
Los niños nacidos de madres que tomaron suplementos de vitamina D durante el embarazo tenían huesos un 18% más densos, en promedio, que los de aquellas cuyas madres no tomaron el suplemento. Esta diferencia puede ayudar a reducir el riesgo de fracturas y otros problemas óseos más adelante en la vida. El esqueleto del bebé se forma rápidamente durante el embarazo y tener suficiente vitamina D ayuda a sostener este crecimiento.
En el nuevo estudio, publicado en la edición de noviembre de The American Journal of Clinical Nutrition, los investigadores hicieron un seguimiento de mujeres embarazadas que tomaron 1000 unidades internacionales (UI) de vitamina D diariamente desde la semana 14 a la 17 del embarazo hasta el parto y realizaron un seguimiento de 454 niños de 6 a 7 años. La vitamina D “fortalece los huesos de los niños y reduce el riesgo de enfermedades como la osteoporosis y las fracturas en etapas posteriores de la vida”, afirmó Moon en el comunicado de prensa.
La nueva investigación se basa en evidencia previa de un ensayo aleatorizado y controlado con placebo de 2018 conocido como MAVIDOS (Estudio de osteoporosis por vitamina D materna), realizado por investigadores de las Universidades de Southampton, Oxford y Sheffield. Dicho estudio siguió a casi 1000 mujeres embarazadas, todas recibiendo 1000 UI de vitamina D diariamente entre las semanas 11 y 14 de embarazo. Según los resultados, la suplementación con vitamina D durante el embarazo mejoró la densidad mineral ósea en los niños a los 4 años.
El equipo de MAVIDOS también demostró que la suplementación con vitamina D podría alterar la actividad genética, ayudando a genes específicos que regulan el crecimiento y la mineralización. Esto ayuda a explicar por qué los niños nacidos de madres que tomaron vitamina D tienen una mejor salud ósea. Además, también respalda los hallazgos anteriores de un estudio a gran escala en Dinamarca, que mostró que la suplementación con vitamina D condujo a huesos más fuertes, menos fracturas en la primera infancia y redujo los defectos del esmalte dental. En conjunto, estos estudios muestran la importancia de garantizar una ingesta adecuada de vitamina D durante el embarazo para promover la salud a largo plazo tanto para la madre como para el niño, escribieron los autores.
"Es poco probable que su vitamina prenatal proporcione suficiente vitamina D", según la Asociación Estadounidense del Embarazo. La vitamina prenatal promedio contiene solo 400 UI de vitamina D, lo que es insuficiente para muchas mujeres, lo que hace necesaria una suplementación adicional. Si bien la vitamina D también se debería obtener a través de la exposición al sol, lo cierto es que muchas mujeres embarazadas no lo consiguen al 100%, razón por la cual, las mujeres embarazadas deberían consultar con sus médicos para asegurarse de que tienen niveles adecuados de vitamina D durante el embarazo, especialmente si corren el riesgo de sufrir deficiencia.
Por otro lado, otras investigaciones muestran incluso otros beneficios: los correctos niveles con vitamina D durante el embarazo reducen la probabilidad de que los bebés desarrollen eczema atópico en su primer año. Además, las mujeres que toman vitamina D adicional tienen más probabilidades de tener partos naturales. Garantizar niveles adecuados de vitamina D durante el embarazo también puede ayudar a prevenir afecciones como enfermedades autoinmunes, como la esclerosis múltiple y la diabetes tipo 1, y trastornos del desarrollo neurológico, como el trastorno del espectro autista (TEA) y el trastorno por déficit de atención e hiperactividad (TDAH), más adelante en la vida de los niños.
Referencia:
Miller, C. 2024. Vitamin D Supplementation During Pregnancy Improves Children’s Bone Density for Years. https://www.theepochtimes.com